Pages

Monday, October 17, 2005

Un viaje desde Cuba cubre de dolor a una familia

 Posted on Sun, Oct. 16, 2005


Un viaje desde Cuba cubre de dolor a una familia

J. BABSON / The Miami Herald
CAYO HUESO

Era una sinfonía colectiva de dolor sin palabras, sólamente sollozos y gemidos y la desesperación de madres y tías, padres y primos.
A 27 millas de allí, el cuerpecito del niño por el que lloraban, Juli, estaba inmóvil en una bolsa de plástico en la oficina del forense del condado de Monroe.
Mientras sus familiares cubanos esperaban fuera de una oficina del gobierno en el Aeropuerto Internacional de Cayo Hueso dos agentes federales, ambos cubanoamericanos, inclinaron la cabeza y contuvieron sus lágrimas también.
Era sábado, a las 3:01 de la tarde, y el mundo parecía cruel.
Julián Villasuso, de 49 años, y Maizy Hurtado, de 32, se escaparon de Cuba, pero su único hijo, Juli, de 6 años, no llegó a hacerlo.
''Este es el precio, es lo que tengo que pagar'', lloraba el padre del niño, pidiendo perdón por un viaje que le costó la vida a su hijo.
Lo único que había entre los cansados pies de Julián y el suelo estadounidense que él arriesgó demasiado para alcanzar era un par de chancletas blancas y azules regaladas por el gobierno.
A Villasuso y a Hurtado se les permitió entrar a Estados Unidos el viernes, casi 48 horas después de que un intento de cruzar el Estrecho de la Florida le costó la vida a su hijo.
El intenso debate sobre su futuro llegó hasta Washington, donde los funcionarios federales consideraban si se debía hacer una excepción de los procedimientos normales migratorios y permitirles quedarse en el país.
Otros 25 cubanos que sobrevivieron el naufragio del jueves, y dos hombres de quienes se sospecha operaban el bote de motor registrado en la Florida, seguían a bordo del escampavías del Servicio Guardacostas en Cayo Hueso ayer, mientras los investigadores federales revisaban la evidencia y entrevistaban a testigos. También trajeron a otro pasajero a los cayos el viernes, porque presentaba síntomas de apendicitis.
Los fiscales federales no han dicho si piensan encausar a los individuos mencionados. Tampoco se sabe con claridad si los otros sobrevivientes, que podrían ser testigos presenciales, serán devueltos a Cuba o si los traerán a la Florida.
Según la política de pies secos/pies mojados de EEUU, a los cubanos que llegan a tierra aquí, incluso ilegalmente, se les permite quedarse, y los que son interceptados en el mar generalmente son devueltos.
El jueves, el cadáver de Juli llegó a EEUU, acompañado por un sacerdote católico.
Sus padres fueron traídos a Cayo Hueso el viernes después de que las autoridades de inmigración determinaron que eso era ''de interés público significativo'', según manifestó Zachary Mann, portavoz de Aduanas y Protección Fronteriza.
Para los familiares, que habían ido en automóvil de noche desde Miami-Dade y Broward para encontrarse con ellos en un centro de procesamiento federal, no había alegría.
En unos pocos días, un querido niño habrá de descansar en una tierra que nunca llegó a conocer.
Su madre, que trabajaba en una panadería y se hizo famosa cuando las deliciosas tortas y pasteles que confecccionaba llenaron muchas fiestas y bodas en un pequeño pueblo cerca de Guanabo Cuba, se agarró de los brazos de un familiar que no había visto en años para no desplomarse.
''Mi bebé, oh, mi bebé'', sollozaba.
En las horas que transcurrieron después que Juli fue hallado por los rescatistas debajo de la lancha volcada, sus pequeños pulmones repletos de agua salada, la madre exigía ver a su hijo sin vida a bordo del escampavías del Servicio Guardacostas.
Afectados por la triste situación, los oficiales aceptaron, pero el capitán tuvo que enviar a alguien que consolara a sus propios hombres, mientras un sacerdote pronunciaba una oración ante los pasajeros y los desconsolados padres, cuyas aspiraciones de una vida mejor habían desaparecido en apenas un instante.
Tras analizar una videocinta del incidente, los investigadores notaron que uno de los hombres sospechoso de participar en el contrabando humano, vestido con ropa negra, al parecer para camuflajearse muhco mejor, se quitó la camisa que llevaba puesta, momentos antes de que la lancha zozobrara, al parecer para mezclarse con el resto de los hombros que tenían el torso desnudo.
Varias fuentes dijeron también que en ocasiones pasadas las autoridades habían detenido a la misma lancha en zonas cercanas a los Cayos.
Además de los dos hombres que se cree estaban a cargo de la operación de contrabando, los investigadores tienen detenidos a otros hombres que fueron capturados en incidentes separados durante la misma noche y que tal vez tengan alguna relación con este caso.
Sin embargo, ayer todos estos detalles estaban muy lejos de la mente de los padres de Juli.
Cuando tocaron por primera vez tierra norteamericana en una base de Guardacostas en Cayo Hueso no tenían ningún esbozo de sonrisa en la cara, así como tampoco ninguna lágrima de alivio. Villasuso y Hurtado no hacían más que llorar.
Horas después, fueron llevados en un vehículo toterreno a un viaje que los alejaría todavía más de Cuba, y de su hijo, a la casa en Hollywood Beach de Mari, la hermana de Julian. Ya una prima había comprado algunas ropas para Juli, pero no para que fuera por primera vez a la escuela, sino para vestirlo en el velorio.
Lo vestirán con pantalones de caqui, una camisa de rayas azules y un cinturón negro. Una camiseta lo mantendrá caliente, un perro amarillo de peluche le hará compañía y un rosario mantendrásu fe.
El esposo de Mari, Alex Gort, está también muy afectado por el entierro de un niño tan pequeño.
''Es un dolor para la familia de aquí y para la fa,milia de allá'', dijo Gort. ``Todo el mundo está destrozado''.

http://www.miami.com/mld/elnuevo/news/local/12913752.htm
 

No comments: